Las 10 reglas del oro de las combinaciones alimentarias

Atrévete a empezar porque aquí no se pierde sólo se gana.

Cuando uno comienza a combinar adecuadamente, pronto notará las diferencias. Es cierto que al principio puede parecer algo complicado y difícil de seguir, pero créeme, no es ciencia espacial. Si yo pude aprenderlo, tú también puedes. Y mira que mi memoria es de nivel mediocre. Para facilitarte las cosas, te voy a explicar todo junto con ejemplos de platos preparados, de manera que puedas visualizar mejor y, en poco tiempo, hacer tus propias propuestas utilizando este texto como base para empezar.

Te animo a intentar combinar bien durante una semana y ver cómo te sientes. Te aseguro que una semana es suficiente para:

• Sentir una mejora inmediata en la salud.
• Dormir mejor.
• Experimentar alivio estomacal.
• Dejar de sufrir las molestias intestinales que solías tener después de las comidas.
• Mejorar la digestión.
• Dejar de sentirte empachado.
• Tener más energía vital.

Las 10 reglas de oro

I. REGLA DE ORO La fruta siempre se come sola y con el estómago vacío.

Las frutas pueden sustituir una de las comidas principales siempre y cuando se elijan adecuadamente (no mezclar frutas dulces con ácidas). Nunca deben tomarse como postre ni acompañarse con otros alimentos, excepto cuajada o yogur natural (vegetal o normal). En caso de estómagos debilitados o cuerpos desvitalizados, es recomendable no consumirlas por la noche o por la tarde, sino en la primera parte del día, cuando las fuerzas digestivas están al máximo.

Resumen:

• La fruta siempre se come sola y con el estómago vacío.
• Las frutas pueden sustituir una de las comidas principales siempre y cuando se elijan adecuadamente (no mezclar frutas dulces con ácidas).
• Nunca deben tomarse como postre ni acompañarse con otros alimentos, excepto cuajada o yogur natural (vegetal o normal).
• En caso de estómagos debilitados o cuerpos desvitalizados, es recomendable no consumirlas por la noche o por la tarde, sino en la primera parte del día, cuando las fuerzas digestivas están al máximo.

II. REGLA DE ORO Tomar solo un concentrado en cada comida, sin mezclar varios concentrados.

Existen dos tipos de alimentos: concentrados y no concentrados. La fruta y la verdura son alimentos no concentrados, mientras que todo lo demás son alimentos concentrados. Cada concentrado se combina bien con las verduras. Con una sola proteína por comida, el plato se digiere mejor y la fuerza de la digestión es más eficiente. No es necesario consumir todas las proteínas en una sola comida, ya que comemos varias veces al día y las proteínas están presentes en casi todos los alimentos que consumimos. La idea de combinar varias proteínas en una sola comida es obsoleta y puede causar molestias digestivas.

Resumen:

• Tomar solo un concentrado en cada comida, sin mezclar varios concentrados.
• Existen dos tipos de alimentos: concentrados y no concentrados. La fruta y la verdura son alimentos no concentrados, mientras que todo lo demás son alimentos concentrados.
• Cada concentrado se combina bien con las verduras.
• Con una sola proteína por comida, el plato se digiere mejor y la fuerza de la digestión es más eficiente.
• No es necesario consumir todas las proteínas en una sola comida, ya que comemos varias veces al día y las proteínas están presentes en casi todos los alimentos que consumimos.
• La idea de combinar varias proteínas en una sola comida es obsoleta y puede causar molestias digestivas.

III. REGLA DE ORO El azúcar se consume siempre solo y nunca acompañado. ¡NO al azúcar como postre!

El azúcar presente en las frutas, el azúcar refinado y el azúcar de los postres (pasteles, tartas, pudines, helados) combina mal con los alimentos consumidos anteriormente. De hecho, no aportan ningún beneficio y sería mejor eliminarlos por completo.

Si deseas disfrutar de un trozo de pastel de chocolate, puedes hacerlo después de haber consumido una ensalada abundante y esperar unos 20-30 minutos antes de continuar con la comida principal. Esto se debe a que, si consumes un postre después de una comida normal, todos los alimentos ingeridos anteriormente se verán afectados por la capa de azúcar que cubre tu comida, lo que resultará en una digestión deficiente y en molestias gastrointestinales.

Esta costumbre puede conducir a varios trastornos y degradaciones del tracto digestivo y el estómago, como úlceras y heridas, que con el tiempo pueden evolucionar hacia enfermedades más graves como el cáncer de colon, estómago y gastritis.

El azúcar simple o doble apenas se digiere en el estómago y pasa rápidamente al intestino, donde se puede acumular si se consume después de una comida completa, causando fermentación ácida junto con otros alimentos ingeridos.

Productos como jaleas, compotas, azúcares blancos y morenos, miel, melaza, jarabes, pan, pasteles y cereales añaden a esta fermentación ácida, lo que provoca hinchazón, gases y aumento del apetito debido a la falta de nutrición.

Los helados tampoco son una opción adecuada, ya que el frío ralentiza el proceso digestivo y dificulta la digestión de almidones presentes en alimentos como patatas, arroces, pastas y panes.

Consumir azúcar junto con alimentos fríos como helados aumenta aún más las molestias digestivas, lo que puede llevar a problemas más graves con el tiempo.

Resumen:

• El azúcar se consume siempre solo y nunca acompañado. ¡NO al azúcar como postre!
• El azúcar presente en las frutas, el azúcar refinado y el azúcar de los postres (pasteles, tartas, pudines, helados) combina mal con los alimentos consumidos anteriormente. De hecho, no aportan ningún beneficio y sería mejor eliminarlos por completo.
• Si deseas disfrutar de un trozo de pastel de chocolate, puedes hacerlo después de haber consumido una ensalada abundante y esperar unos 20-30 minutos antes de continuar con la comida principal.
• Esto se debe a que, si consumes un postre después de una comida normal, todos los alimentos ingeridos anteriormente se verán afectados por la capa de azúcar que cubre tu comida, lo que resultará en una digestión deficiente y en molestias gastrointestinales.
• Esta costumbre puede conducir a varios trastornos y degradaciones del tracto digestivo y el estómago, como úlceras y heridas, que con el tiempo pueden evolucionar hacia enfermedades más graves como el cáncer de colon, estómago y gastritis.
• El azúcar simple o doble apenas se digiere en el estómago y pasa rápidamente al intestino, donde se puede acumular si se consume después de una comida completa, causando fermentación ácida junto con otros alimentos ingeridos.
• Productos como jaleas, compotas, azúcares blancos y morenos, miel, melaza, jarabes, pan, pasteles y cereales añaden a esta fermentación ácida, lo que provoca hinchazón, gases y aumento del apetito debido a la falta de nutrición.
• Los helados tampoco son una opción adecuada, ya que el frío ralentiza el proceso digestivo y dificulta la digestión de almidones presentes en alimentos como patatas, arroces, pastas y panes.
• Consumir azúcar junto con alimentos fríos como helados aumenta aún más las molestias digestivas, lo que puede llevar a problemas más graves con el tiempo.

IV. REGLA DE ORO Las sandías y los melones siempre se consumen solos y nunca acompañados. No se deben combinar melones con jamón ni sandías con queso.

Hay dos razones principales para esto. Primero, las frutas como sandías y melones contienen azúcares que, si se combinan con otros alimentos, pueden interferir con la digestión y hacer que los alimentos previamente consumidos se desperdicien. Segundo, debido a su alto contenido de agua, las sandías y melones se digieren muy rápidamente, lo que puede causar problemas digestivos si se combinan con otros alimentos.

Resumen:

• Las sandías y los melones se consumen solos y nunca acompañados.
• Evita combinar melones con jamón y sandías con queso.
• Su alto contenido de agua los hace digerirse rápidamente, lo que puede interferir con la digestión si se combinan con otros alimentos.

V. REGLA DE ORO Las proteínas y los carbohidratos siempre por separado en las comidas

Es crucial consumir proteínas y carbohidratos por separado, ya que requieren diferentes enzimas para su digestión y tienen tiempos de digestión distintos.

Cuando se combinan, las proteínas y los carbohidratos pueden inhibir la acción uno del otro, lo que conduce a una mala digestión, indigestión y posiblemente putrefacción de los alimentos en el tracto digestivo.

Resumen:

• Es importante consumir proteínas y carbohidratos por separado.
• Requieren diferentes enzimas y tiempos de digestión.
• La combinación incorrecta puede llevar a una mala digestión, indigestión y putrefacción de los alimentos.

VI. REGLA DE ORO Es recomendable consumir frutos secos solo con ensaladas de vegetales y no tratarlos como un simple picoteo o refrigerio.

Los frutos secos son alimentos muy concentrados, ya que contienen grasas, proteínas y carbohidratos, lo que los hace pesados para la digestión. A menudo, es beneficioso remojarlos antes de consumirlos, al igual que se hace con las legumbres.

Combinar frutos secos con otros alimentos concentrados, como pollo con nueces o helado con frutos secos, puede hacer que la comida sea demasiado pesada, especialmente para aquellos con estómagos sensibles, lo que puede provocar molestias y pinchazos.

Para consumirlos de manera óptima:

• Es preferible remojarlos antes de consumirlos.
• Consume frutos secos con moderación, en cantidades pequeñas (unos 5-6 piezas).
• Elige frutos secos crudos en lugar de tostados o salados.
• Debido a que se vuelven rancios rápidamente, es mejor comprarlos en cáscara cuando sea posible.

Resumen:

• Consumir frutos secos solo con ensaladas de vegetales.
• No considerarlos como un picoteo casual.
• Remojarlos antes de consumirlos.
• Consumir en pequeñas cantidades y con moderación.
• Preferir frutos secos crudos y comprarlos en cáscara cuando sea posible.

VII. REGLA DE ORO Es preferible consumir la leche sola o no consumirla en absoluto

Somos los únicos animales en el planeta que continúan consumiendo leche durante toda su vida, y además, somos los únicos que consumen la leche de otras especies. En la naturaleza, los mamíferos toman leche solo durante los primeros meses o años de vida, y luego pasan a una dieta diferente una vez que sus dientes han crecido lo suficiente para comer alimentos sólidos. La leche materna es necesaria solo durante el período de lactancia y crecimiento del bebé, que generalmente dura hasta los dos años o hasta que aparecen los dientes. El organismo humano no está adaptado para consumir leche de otras especies, ya que la leche materna está adaptada a las necesidades específicas de cada especie. La idea de consumir leche y productos lácteos durante toda la vida es cultural y socialmente promovida, pero no es necesaria para la salud. La leche de vaca se combina mal con otros alimentos y puede interferir con la digestión debido a su capacidad para formar grumos en el estómago. Si decides consumir leche, es preferible hacerlo sin mezclarla con otros alimentos, especialmente con frutas. Evita las combinaciones incorrectas como batidos de leche con frutas, helados de leche con frutas o cereales con leche.

Resumen:

• Preferible consumir la leche sola o no consumirla en absoluto.
• Evitar mezclar leche con otros alimentos, especialmente con frutas.
• La leche de vaca puede interferir con la digestión y se combina mal con otros alimentos.

VIII. REGLA DE ORO Eliminar los postres.

Aunque disfrutemos de unos diez minutos de placer al consumirlos, no debemos ignorar las consecuencias negativas que tienen para nuestra salud.

Los postres tomados después de las comidas principales siempre son perjudiciales, ya que generalmente los consumimos sin hambre, lo que impide la secreción adecuada de jugos gástricos. La ingesta de postres crea una capa de azúcar sobre la comida ingerida previamente, lo que puede provocar fermentación y putrefacción.

Si te sientes tentado a tomar un postre después de una comida abundante, reflexiona si realmente quieres sentirte más pesado después de haber comido una comida copiosa. Si decides disfrutar de un trozo de pastel por la tarde, es aconsejable precederlo con una ensalada abundante de vegetales crudos, que aumentará la secreción de jugos gástricos. Luego, espera unos 20 minutos antes de consumir el postre. Sin embargo, lo ideal sería evitar el segundo plato por completo.

Recuerda que los helados también pueden causar daño adicional, ya que el frío ralentiza los procesos digestivos.

Resumen:

• Eliminar los postres de la dieta.
• Consumirlos después de las comidas principales es perjudicial.
• Considerar los efectos negativos en la salud antes de consumir un postre.
• Si decides tomar un postre, precederlo con una ensalada de vegetales crudos.
• Evitar los segundos platos después de los postres.
• Tener precaución con los helados, ya que el frío puede interferir con la digestión.

IX. REGLA DE ORO Las frutas que constituyen una sola comida.

Una regla muy importante que exploraré más detalladamente en otro artículo se refiere a las pautas sobre cómo deberían consumirse las frutas. Para dar una breve introducción al tema, las frutas son alimentos perfectamente adaptados a nuestra fisiología y no deberían perjudicar nuestra salud. Nuestro organismo está completamente adaptado a su digestión, por lo que no es normal experimentar malas digestiones o putrefacciones debido a su consumo. Si alguien experimenta molestias al consumirlas, puede ser indicativo de otros problemas, como mucosa digestiva deteriorada o daño en el intestino, o simplemente falta de conocimiento sobre cómo consumirlas adecuadamente.

De todas formas, la fruta fresca es un alimento que puede ser consumido por todos sin restricciones, siempre y cuando sepamos cómo y cuándo consumirla. Proporciona vitalidad y energía, fundamentales para combatir enfermedades o mantenerlas bajo control. No existe otro alimento ni suplemento elaborado en laboratorio que pueda ofrecer tantos beneficios como una simple, deliciosa y fresca fruta de temporada, recién recolectada.

Resumen:

• Las frutas constituyen una comida completa. Se puede disfrutar perfectamente de una ensalada de 2 o 3 frutas, o incluso mejor, de una sola fruta, sin necesidad de acompañamiento alguno. Las frutas son azúcares simples que apenas se digieren en el estómago, por lo que no se deben mezclar con otros alimentos. Consumirlas junto con otros alimentos puede ocasionar malestar estomacal y digestiones pesadas, fenómenos que muchos de nosotros confundimos con alergias alimentarias.

X REGLA DE ORO Aunque un alimento sea muy nutritivo y de alta calidad, si no lo comemos de la manera adecuada, no nos beneficiará.

A menudo, nos perdemos en la información tergiversada y las opiniones contradictorias sobre alimentación saludable. Lo malo de nuestros tiempos es el caos y las trolas que nos sueltan siempre y cuando uno se pueda beneficiar de ellas. Por eso antes de seguir otra dieta exhaustiva, antes de ir de compras a por unos productos poco asequibles y fuera de la temporada, antes de escuchar a los especialistas de los telediarios, vamos a recordar que lo más simple es lo mejor. Las mezcolanzas tremendas que nos proponen, los cinco o seis productos en solo una comida, el horario de las ingestas raro, las recetas que te sacan de quicio porque te manipulan y hacen comparar los productos que ni siquiera vas a poder a pronunciar su nombre – todo esto hay que mirar con mucha cautela.

Recuerda que no es necesario hacer mezclas de todos los macronutrientes en una sola comida. No es recomendable ni importante para nuestro organismo. El organismo es sabio y como comemos varias veces por día él puede sacar de cada comida lo que le interesa – por eso no es importante juntar todos los macronutrientes en un solo plato porque así le servimos a nuestro cuerpo una mezcla tremendamente pesada y poco digestiva. En vez de beneficiarse de esto el organismo se va atorar, agobiar, cansar y desgastar a la hora de querer digerir todo esto.

Comiendo varias veces por día – que normalmente tampoco es recomendable porque tres veces por día es lo máximo y las dos es hasta más provechoso – y confeccionando unos platos con alimentos frescos y naturales, aportamos a nuestro cuerpo todo lo necesario y en las cantidades exactas. Si por la mañana comemos frutas y un poco de yogur, que por la tarde sea un poco de legumbres con aceites vegetales (semillas o aceites vegetales en frío) con verduras asadas o cocidas o una buena ensalada de verduras crudas con algún toque. Así vamos a aportar a nuestro organismo todo lo que necesita sin machacarlo con todos los macronutrientes a la vez – que como ya sabemos – no tiene beneficios y puede perjudicar gravemente nuestra salud digestiva y emocional como el resultado más a largo plazo.

Resumen:

• Consumir alimentos de manera adecuada es crucial para obtener sus beneficios nutricionales.
• Es importante evitar la información tergiversada y las opiniones contradictorias sobre alimentación saludable.
• Las mezclas excesivas de alimentos en una sola comida pueden ser perjudiciales para la digestión.
• El organismo puede extraer de cada comida lo que necesita, por lo que no es necesario combinar todos los macronutrientes en un solo plato.
• Comer varias veces al día y seleccionar alimentos frescos y naturales es beneficioso para el cuerpo.
• Es recomendable evitar comer más de tres veces al día para una mejor digestión y aprovechamiento de los nutrientes.
• La variedad en la dieta con frutas, yogur, legumbres, aceites vegetales y verduras contribuye a una nutrición equilibrada.
• No es beneficioso sobrecargar el cuerpo con todos los macronutrientes a la vez, lo que puede tener consecuencias negativas a largo plazo para la salud digestiva y emocional.

Ahora vamos a repasar las reglas convencionales, y sería genial si pudieras recordarlas tanto como sea posible 🙂 Si no, siempre puedes volver a este artículo que espero que encuentres interesante y útil.

Además, si alguna vez quieres probar con un especialista, estoy aquí para ayudarte. Visita mi página web para obtener más detalles. Te garantizo que vale la pena comenzar conmigo para luego sentirte seguro y confiado en lo que haces. Porque lo harás bien y lo notarás pronto 🙂 ¡Libérate y atrévete a disfrutar de la vida, solo tienes una! No la desperdicies en tonterías…